En su intervención de cierre, el coordinador federal saliente agradeció el apoyo expresado por la totalidad de las delegaciones, destacando que esta está siendo la asamblea más unitaria de la historia de Izquierda Unida. Lara apeló a la “fraternidad” para que en la siguiente asamblea “no haya más conflictos que los meramente políticos”. “El reto que tenemos por delante hace pequeñas nuestras diferencias pequeñas”, recalcó Lara, llamando a “parar la ofensiva del capital para no llegar a la desgraciada situación a la que se enfrenta hoy el pueblo griego”.
El debate sobre el modelo territorial estuvo presente en su intervención defendiendo que “tiene que haber un estado que sea garante de que la igualdad básica que tiene que darse en todos los territorios del estado”. Además reivindicó que los derechos políticos y sociales que se recogen en la Constitución estén garantizados por la misma.
Cayo Lara llamó a reforzar la organización y extender su presencia al conjunto de pueblos y ciudades de España, reconociendo que IU carece de organización en muchas localidades, pese al crecimiento electoral experimentado en los últimos cuatro años.
El coordinador reivindicó que IU está en la "movilización permanente", pero que “en la calle solo no vale”, declarando que el objetivo es “llegar al poder”, marcando como vía para ello la participación en las instituciones como expresión de la democracia.
Acerca de las diferentes posiciones alcanzadas por las federaciones de Extremadura, Asturias y Andalucía en cuanto a la política de pactos postelectorales, que tuvieron presencia en el debate, Cayo Lara expresó que representan una muestra de la democracia interna en tanto que se tomaron con la participación del conjunto de la militancia.
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