lunes, 20 de septiembre de 2010

POR QUÉ DEBEMOS IR AL HUELGA el día 29 de Septiembre LOS TRABAJADORES.

Nadie puede creerse de verdad que los recortes impuestos a los trabajadores pueden arreglar nada, excepto los beneficios empresariales.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Como todos sabéis, los sindicatos UGT, CCOO, USO y CGT hemos convocado una jornada de huelga para el próximo día 29 de septiembre. Los motivos de la convocatoria son también sobradamente conocidos por todos:

- La reforma laboral recientemente aprobada por el Gobierno, que abarata los costes de despido y los subvenciona (8 días a costa de nuestros bolsillos), eliminando prácticamente la tutela judicial en los despidos por causas “objetivas”; que deja la negociación colectiva prácticamente sin valor, al permitir el incumplimiento de los convenios colectivos por parte de los empresarios a través de las “cláusulas de descuelgue”; que privatiza en la práctica el Instituto Nacional de Empleo (INMEM), permitiendo el acceso de las empresas de trabajo temporal, y demás agencias de colocación privadas, en la gestión de los Servicios de Empleo…etc.etc.



- La inminente reforma a la baja de las pensiones públicas, haciendo el cálculo de las pensiones contabilizando toda la vida laboral, y exigiendo un mínimo de 20-25 años de cotización para tener derecho a una pensión…y de postre, aumentando la edad de jubilación hasta los 67 años.

- El cargar exclusivamente sobre las espaldas de los trabajadores la salida de la crisis, argumentando que son medidas imprescindibles para conseguirlo. Así, a los causantes de la crisis, no sólo les saldrá totalmente gratis la recuperación, sino que les crearán un mercado laboral con unos trabajadores más baratos, con menos derechos, y por tanto, más sumisos.

A quienes estén convencidos de que esta reforma laboral, y el resto de medidas que están por venir; no les afecta, por el hecho de ser un empleado, hay que decirles que se equivocan y mucho: porque el abaratamiento del despido, será aplicable a los trabajadores de una empresa al igual que a los de cualquier otra; porque el recorte de las pensiones públicas es para todo el mundo independientemente de la empresa en la que trabajen; y sobre todo, porque afecta al futuro inmediato de nuestros hijos, convirtiéndolos en “carne de cañón” para la voracidad del negocio.

Nadie puede creerse de verdad que los recortes impuestos a los trabajadores pueden arreglar nada, excepto los beneficios empresariales. La eliminación del impuesto sobre el patrimonio, la existencia del paraíso fiscal que suponen las SICAV, el fraude fiscal cifrado en 90.000 millones de euros, o el hecho verificable de que los empresarios españoles declaren, por término medio, 6.500 euros menos que sus asalariados, son claros ejemplos de medidas sobre las que se podría actuar para incrementar los ingresos, sin meter la mano en el bolsillo de los trabajadores.

Parece mentira que esta Europa del “bienestar”, sea ahora el vehículo utilizado para que los trabajadores de este país involucionemos, con el único objetivo de mantener el beneficio de otros. No tuvieron tantos remilgos a la hora de coger el dinero público para reflotar algunos bancos hace tan solo cuatro días, y ahora, parece que el estigma de la Unión Europea, son los derechos de los trabajadores.

Pero la realidad es otra: los beneficios de las 35 empresas y bancos más grandes de este país, crecieron un 25% hasta situarse, solamente en un trimestre, en 11.598 millones de euros. Los 584 consejeros ejecutivos y altos directivos de estas 35 empresas y bancos cobraron, por término medio, un millón de euros en el peor año de la crisis.

Como quiera que el derecho a la Huelga es un derecho constitucional, recordamos a todos que no es necesario avisar con antelación a la Empresa de si se ha decidido hacer o no la huelga, aunque lo pregunten. Simplemente no se acude al trabajo, y en el parte mensual de actividad, se pone ese día como ausencia de día completo por huelga.

Ha llegado el momento de que la clase trabajadora le digamos, tanto a políticos como a empresarios, que hasta aquí hemos llegado: ¡Basta de recortes sociales y laborales! 29 de septiembre: ¡HUELGA GENERAL!

Nos entristece comprobar que algún sindicato convocante, no está trasladando, con la misma fuerza que lo hacen sus organizaciones estatales, a los trabajadores los motivos de esta movilización, simplemente porque ahora no se trata de pedir que recapacitemos, decir que empieza el curso laboral, o felicitar el cumpleaños…ahora se trata de pedir la participación en la huelga general.

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